Honorando a su apellido, este leridano de 75 años hace catorce que impulsó Bici ictus, un grupo de ciclistas que han sufrido ictus y que quedan semanalmente para rodar en bicicletas adaptadas. La iniciativa está consolidada y ayuda a los supervivientes a mejorar su estado físico, emocional y cognitivo a través del deporte.